Años más tarde una expedición alemana intenta la cumbre siguiendo la peligrosa arista N.E que con sus voladas cornisas no favorece el tránsito... una cordada relevante compuesta por Tony Mazenauer y Fritz Kasparrek (este último, conquistador de la cara Norte del Eiger) desaparece en esta arista y la expedición se tiene que retirar. Hoy existe bajo el collado de Palcay (habitual campo base para la montaña) y sobre un visible bloque rocoso, una placa conmemorativa de aquel desgraciado suceso.

El 23 de agosto de 1975 le toca el

turno a la larga y accidentada cresta S.E de la mano de una expedición australiano-neozelandesa compuest por Peter Jennings, Wayne Barton y Michael Andrews. Esta ascensión constituyó la novena a la cumbre.
Nota: Existe, una controversia en cuando a la paternidad de la primera ascensión de esta cresta S.E, ya que consta la actuación anterior de un potente grupo de japoneses que consiguió el ascenso por esta ruta. Lamentablemente la única referen cia encontrada sobre esta ascensión nipona data de una revista Iwa to Yuki, escrita, claro está, en japonés, así que sin una traducción del texto no hay dato concreto.

La arista Oeste del Salcantay es una ruta que sigue virgen al cabo de los años dada la complejidad de su trazado y la lejanía de los puntos tradicionales de aproximación, lo que obliga a porteos suplementarios a base de tirar de mochila. Es factible, pero será un problema para resolver a nivel andino.

Esta arista fue intentada en 1975 por un grupo de alpinistas catalanes del club "Agrupació Científico Excursionista" compuesto por Manuel Punsola, Miquel Sala, Xavier Varela, Ramón Armengol, Antoni Sors, Antoni Rosa, Miquel Nogueras y Vicente Arís.

El 5 de agosto de 1975, tres componentes de esta expedición abordan la arista por un contrafuerte adicional de la vertiente Norte que previamente había sido reconocido. Escalan durante buena parte del día hasta llegar a un punto con dos posibilidades que se les antojan irrealizables. La lógica era abordar la cresta de hielo, cosa imposible dada la falta de medios materiales. La otra opción sería el flanqueo de las vertientes de la arista para ir a buscar el collado entre las dos cimas del Salcantay.