después de hablar sobre lo estricto que son allá, ni pensar en ingresar a aquel parque como incognito, porque el parque del Aconcagua está muy bien estructurado, sobre todo muy rígido con sus sanciones al “pillar” a alguien que irrumpa las normas establecidas. No es como aquí donde todos entran, guían y hacen lo que quieren como si fuese casa del vecino, creo que tenemos que seguir aprendiendo y con el tiempo esto sea diferente.
Pero mis ganas de intentar ascender por lo menos una montaña no se hizo esperar así que me fui Bolivia y llegue a la Paz junto con la lluvia. Para variar no me quedaba mucho tiempo, si quería por lo menos escalar algo sencillo. Así que me recomendaron al señor Hugo Berrios quien fue un gran anfitrión en su tierra y colaboro mucho con mi pequeñita expedición. Bueno para ser honesto esta |