De horma rígida.- Siendo la estructura interna rígida, facilitando así el "canteo" y ademas mitigan el dolor en fisuras y empotramientos, no es necesario que el ajuste al pie sea tan firme (tampoco debe quedarte como para caminar tranquilo largo tiempo). Están recomendadas para escaladas en planos verticales o placas de "cantos y regletas", donde esta cualidad nos permitirá descansar nuestros gemelos y nuestros pies ante la carga continua del peso corporal y nos proporcionarán mayor seguridad al pisar cantos pequeños ya que debido a la rigidez de la suela tienen mayor resistencia a la torsión.

De horma blanda.- Ofrece una mayor sensibilidad y mejora la escalada frontal vertical. Ha de estar muy ajustado al pie (tanto que a veces no se puede estar tantos minutos con el gato puesto). Es necesario tener un cierto nivel de resistencia en el pie. Estan pensadas para vías de Boulder, desplomes o techos, donde debido a la dificultad de las vías “tener sensibilidad” es un factor imprescindible para poder "sentir" la roca y progresar por ella.

El ajuste al pie no significa que se tenga que escalar con dolor, pero tampoco sentirlas tan cómodas como zapatillas de correr. Si el dolor persiste tras el apretado y no pasa tras unos minutos, puede que no sea el modelo o talla correcta, o que tus pies tengan ciertas malformaciones como juanetes, cayos u otras lesiones. No es aconsejable usar los pies de gato si el dolor es demasiado intenso.

Existen muchas marcas competitivas en el mercado mundial. Las marcas europeas como La Spotiva, Boreal, Tenaya, Rock Pilars, etc., frente a las marcas americanas como Five Ten, Mad Rock y Evolv principalmente.

Los pies de gato son un determinado tipo de calzado que utilizan los escaladores de roca y/o palestra (estructuras artificiales que simulan paredes para escalar), llamadas así por su ligereza, y a que son flexibles y adherentes, gracias a que incorporan en la sección de la suela, bandas laterales y banda frontal una goma especial adherente que proporciona mayor adherencia y precisión. Es fundamental que queden bien apretados, aunque sean incómodos en un primer momento; el ajuste es importante para ganar en sensibilidad, y notar los pequeños salientes de roca sobre los que apoyaremos nuestro peso al escalar.

Las podremos encontrar básicamente de dos tipos, en base a su horma:

Algunos pies de gato vienen con los sistemas de ajuste de pasadores (cordones) y otros con sistemas de velcro (pega pega) para cerrar y ajustar el calzado. Esto es indiferente respecto a lo técnico del calzado, salvo que lo vayas a utilizar frecuentemente en vías de boulder, ya que ahí si tendrás que sacartelos, ponertelos y ajustarlos frecuentemente, con lo cual los de velcro van mejor y se calzan mas rápido. Existen también modelos que solo llevan cintas elasticas como las Ninja de Boreal.

Escoger entre algún determinado modelo de gatos dependerá de tus gustos básicamente (forma y colores), pero si bien no hay diferencias técnicas sobresalientes entre una marca u otra, si las hay en los materiales empleados para su elaboración dependiendo su lugar de origen, ya que las marcas europeas utilizan materiales naturales en su fabricación, lo cual repercute en una mejor duración del calzado y en una menor producción de malos olores, frente a los materiales sintéticos utilizados por las marcas americanas que tienden a retener mas el sudor en sus tejidos, lo cual produce los malos olores en el calzado.

Si recién empiezas a escalar (sea en roca o palestra) y quieres comprar tu primer par de pies de gato, te recomendamos empezar por alguno de suela rígida, que al probártelos y tenerlos puestos durante varios minutos no te caucen dolor o molestias, pruébatelos sin medias o con calcetines muy finos, ya que con el uso igualmente tenderán a seder un poquito. Eso sí, antes de comprar unos pruébate varios modelos y marcas para ver cuál te acomoda mejor.

Texto adaptado por: Alberto Hung.