Huantzan  
 
Por: Alberto Hung.

El nevado Copa está considerado como la montaña de 6mil metros más fácil de ascender en la Cordillera Blanca, catalogación que adopta debido a las sencillas rampas que posee desde su campo alto hacia la cima, sin embargo, es a su vez una montaña muy peligrosa, sus enormes grietas (que ha costado varias víctimas) y su acceso hacia el campo uno (con mucha caída de rocas y aludes), lo han convertido actualmente en una de las clásicas montañas de 6mil metros menos frecuentadas de esta famosa cordillera.

   
El Copa nos muestra además una impresionante cara sur y este con rectilíneas aristas defendidas por tramos mixtos, sin duda un buen objetivo para nuevas aperturas.
Pertenece a un enorme macizo en extensión, el del Copa, ubicado en un lugar central de la Cordillera Blanca, cuenta con dos cimas, ambas superan los 6mil metros.
En general, su composición geológica es granítica aunque al sur por la quebrada Honda desde la espina dorsal de este macizo que se estrecha existen rocas metamórficas.

 
El significado de su nombre podría provenir de la similitud con el tosco sombrero de fieltro que usan los campesinos barones de la región ancashina, al cual llaman "sombrero de copa"; otros discrepan esta teoría y le darían otro significado, el cual podría provenir del vocablo quechua “kupapi” que significa mercurio.

Su primer ascenso fue realizado en 1932, sus dos picos fueron escalados por la expedición alemana del DAV del Dr. Kinzl, alcanzan la cima E. Hein, y E. Schneider, posteriormente en la misma expedición lo haría Hoerlin, alpinista y científico, quien haría mediciones de rayos cósmicos en sus cimas, en las que estuvo por varias semanas. Para esta expedición partieron desde la Hacienda Copa.
En aquella expedición alemana algunos porteadores atravesaron por primera vez el macizo del Copa desde el oeste hacia el este. Esto pasó al extraviarse durante la neblina. Ellos le llevaban víveres a Hoerlin, que estaba en el pico norte y, a la bajada, perdieron el camino alcanzando tierra firme más arriba de Pompei, pero estaban en el este y no como ellos creían, en el oeste.
Ya desde aquellos años, el Dr. H. Kinzl calificaba a la cresta sur del Copa como "una de las vías más difíciles de escalar en el futuro", y así sería, en el 2004, la expedición de Don Bosco, conformada por guías de montaña de la AGMP y alpinistas italianos, realizarían esta gran escalada y alcanzarían la cima con un vivac en plena arista.