Pag.14

 
taparan la visibilidad de la cumbre, asimismo tome fotos del Rasac que se encontraba abajo debajo de nosotros  para tener las últimas vistas del paisaje. Entramos la canaleta de dos largos a 70-80° en nieve y hielo con buena protección, en la salida de la canaleta se giró a la izquierda para llegar a la puerta que pudimos ver desde el Rasac. Luego cambiamos a la cara este había buena nieve (60-70°). Seguimos en simultaneó por media hora más hasta unos hongos de nieve en la cumbre. No nos acercamos tanto al filo de la arista porque no podíamos ver bien entre las nubes y el miedo que una cornisa puede colapsarse debajo de nosotros.

Es así que a las 11:56am del 12 de setiembre y como tenía señal, llame a mis amigos Sergio Ramírez y Rommel Amado para darles la noticia que estábamos en la cumbre del Yerupajá. Nos quedamos unos diez minutos para tomar agua y comer unos snack antes de descender. Regresamos por la arista escalando hacia abajo hasta llegar a la cima de la canaleta, luego coloque una estaca y empezamos un descenso largo de trece rapeles con mis cuerdas gemelas 7.7mm de setenta metros. Bajamos en línea recta al costado de los bloques de hielo que pasamos en la subida, encontramos un  buen hielo para poder fabricar los abalakovs.

En total dejamos tres estacas y diez abalakovs mientras escalábamos tramos cortos en la bajada. En el último largo Luis se lastimo el tobillo cuándo bajo por un bloque vertical y choco con la roca. Estuve tan cansado que no tenía la energía para enrollar la cuerda y quería salir de la pared gigantesca donde nos podía caer algo en cualquier momento. Amarre la cuerda a mi arnés y las jale por la meseta buscando la carpa, estaba oscureciendo y la visibilidad entre las nubes empeoraba solo se podía ver a lo mucho hasta 4 metros.
 
Campo Dos, bajo la enorme pared oeste del Yerupajá Grande.
de la pared. La primera parte de la escalada fue de 400 metros de hielo duro a los 60-70°. Luis y yo decidimos en intercambiar turnos durante la escalada cuando uno de los dos se cansaba, nos demorábamos por proteger bien la ruta usando tornillos cada cuatro o cinco metros. Llegando a la arista noroeste agradecimos que la superficie cambio a nieve dura en ves del hielo. Así empezamos una travesía arriba y a la derecha debajo de unos grandes bloques de hielo. Pudimos ir rápido escalando simultáneos por la buena calidad de nieve entre los 60-70°. Un largo de hielo duro (70-80°) y después un largo más de nieve (65°) nos llevó a el puente que cruzó la rimaya antes de la pared final.

A los 150 metros verticales antes de la cumbre vi que las nubes se acercaron rápidamente y en minutos estaríamos completamente en blanco, tapados. Saque unas fotos y video  antes  que  las  nubes  nos
   
 
Luis Crispin iniciando la escalada en la pared del Yerupajá.
 

Pag.15